INVASIONES EN CANCUN

Pocas son las oportunidades de ver notas de prensa, realmente objetivas. Es por eso que reproducimos la nota publicada por Roman Martinez, EN EL dIRIO DE qUINTANA rOO, QUE RESUME DE MANERA OBJETIVA, la situacion en las invasiones de Cancun.

Desde la Muerte de Paquito, del Ultimas Noticias,no leiamos algo tan bien investigado y redactado.

En los alrededores de la ciudad existen infinidad de colonias precarias

Román MARTINEZ

Predios invadidos

CANCUN, 31 de octubre.-El que se diga que el que viene a vivir a Cancún se puede hacer rico, es una mentira, porque ya pasaron los años en los que quien ponía cualquier negocio, por más pequeño que fuera, florecía y permitía de la noche a la mañana que a esas personas que trabajaron duro y con fe les sonriera la suerte, sin tener que haber estudiado en la universidad, aunque hay miles quienes dejaron su lugar de origen y a sus familias, que en lugar de superarse les ha sucedido todo lo contrario, pues han terminado invadiendo terrenos que no son suyos para tener un lugar para sus hijos.

Prueba de ello son las invasiones de predios de las regiones 236, donde habitan 60 familias, que se registró después de las elecciones para alcalde, las cuales ganó Greg Sánchez, quien ya lleva en el cargo un año y siete meses. También las invasiones de las regiones 232 y 234 donde viven gente proveniente de Chiapas, Tabasco y Guerrero.

El problema que tuvo su punto álgido cuando la nueva administración municipal asumió el poder, se contrarrestó con la aprobación de los diputados de la XII Legislatura del Congreso del Estado, del artículo 160, de la ley emitida el 18 de septiembre del 2008, mediante la que se castiga la invasión de terrenos como un delito grave y pena corporal, sin derecho a fianza.

En Isla Mujeres y Puerto Morelos hubo necesidad de desalojar a invasores de terrenos ajenos con la intervención de la policía, haciendo valer lo que marca la Ley. En Isla Mujeres actuaron en contra de 60 familias que representaban 250 familias.

En Puerto Morelos a igual número de paracaidistas, a los que también se les presionó con la Ley en la mano. Esas áreas invadidas de predios de las regiones 232, 234, 236 y 237, solo los de la 236 y 237, son familias que están en terrenos cuya potestad le corresponde al Instituto de Fomento de la Vivienda y Regularización de la Tenencia de la Tierra, Infovir, las demás son zonas de equipamiento y terrenos propiedad de ejidatarios, de ahí que, quienes invaden se sienten con derechos a pesar de que cometen un ilícito, pues actúan en contra de la Ley. No obstante, a esas personas no se les ha maltratado.

SIN SERVICIOS ELEMENTALES

Asimismo, hay invasión de terrenos sin servicios elementales, propiedad de particulares, en Cuna Maya, atrás de Tierra Maya, rumbo a la salida a Mérida, donde viven 500 familias que se asentaron hace dos años, a las cuales les están ayudando a través del líder de la Asociación Unión Popular Democrática, Víctor Hugo Morales Olivares, quien ya gestionó que les introduzcan energía eléctrica, pues ya lograron que les den servicio de educación primaria, en una escuela en la que estudian 100 pequeñitos, que empezó a operar en este año, en un terreno que originalmente estaba destinado para ello.

En Cuna Maya, donde hay mucha inseguridad, están gestionando una oficina de seguridad pública, independientemente de que ya tienen, desde hace tres meses, un comedor comunitario a base de cooperación en el que atienden a 60 familias, a las que les venden una comida fuerte al día por 10 pesos. En Cuna Maya Lino Avendaño, quien estuvo en el movimiento de Villas Otoch, que le permitió colocarse en la dirección de Servicios Públicos, desde hace cuatro meses, valiéndose de su puesto e influencias está revendiendo, en una oficina que construyó en la parcela 206, terrenos que le pertenecen a ejidatarios, a razón de ocho mil pesos, de 10 por 20 metros, principalmente a gente que trabaja en la construcción, que si no los ocupan de inmediato en tres días, los revende a otros interesados y no le regresa su dinero a la gente humilde.

En la colonia Valle Verde, ubicada a la altura del kilómetro 21, donde no hay nada, solo luz en la entrada, sobre la carretera, habitan mil 500 familias invasoras que representan cinco mil habitantes, quienes se están dando a la tarea de organizar un Comité, pues sufren inseguridad, asaltos y asesinatos que están a la orden del día.

TELARAÑA DE “DIABLITOS”

En Rancho Viejo la situación es similar en los predios conocidos como La Cadena, propiedad del Infovir, en los que a través de la Unión Democrática Popular se trabaja en un proyecto para que les vendan la tierra, en la que están asentadas 600 familias que representan dos mil personas como mínimo. Ahí no hay nada de servicios públicos, aunque el suministro de energía eléctrica la jalan con “diablitos” de los postes más cercanos.

El coordinador del Infovir en la Zona Norte del Estado, Enrique Alcocer Rodríguez afirmó que están buscando espacios para beneficiar a la gente más necesitada, porque esa es la responsabilidad del Gobierno del Estado, que ha solicitado al Gobierno Federal que se desincorporen más de 120 mil hectáreas, para satisfacer las necesidades de predios para gente pobre de los nueve municipios de Quintana Roo, porque somos una entidad que por su dinamismo sigue atrayendo mano de obra, principalmente en los municipios de Benito Juárez, Solidaridad e Isla Mujeres.

Por todo lo anterior, Cancún que a nivel nacional e internacional goza de la fama de ser el primer destino turístico de México, sigue siendo tierra de contrastes, de grandes y lujosos hoteles, en los que vienen a hospedarse grandes luminarias de todo el mundo, que tampoco deja de ser imán de miles de compatriotas que resultan engañados por el canto de las sirenas, porque llegan en busca de mejores condiciones de trabajo y de vida, que terminan por necesidad, invadiendo terrenos que no son suyos, ya que no les queda otra opción para darles un lugar en el que vivan sus familias, aunque sufran de incomodidades y de la falta de servicios elementales como agua, luz, drenaje, seguridad pública, escuelas, calles y avenidas, entre otros, que deben de otorgarles las autoridades de los tres niveles de Gobierno, por humanidad.